Lorena Tasca
04 de mayo, 2021Suzanne Ciminesi, una profesora estadounidense, descubrió que los cómics matemáticos podían ser la clave para que sus estudiantes quisieran desarrollar cada problema en sus clases de matemática.
Suzanne Ciminesi es una profesora estadounidense de Matemática de básica, con más de 16 años de experiencia. Durante esos años, ha descubierto que para trabajar la materia, es realmente clave impulsar la participación de los estudiantes y buscar formas de cada estudiante conecte lo aprendido. Su estrategia más exitosa hasta la fecha para lograrlo: cómics matemáticos.
"Como sabía que los cómics, las novelas gráficas, el manga y el anime se encuentran entre los formatos favoritos de mis estudiantes, decidí intentar sacar provecho de ese entusiasmo, transformando los problemas matemáticos, sin vida, en cómics con soportes de lectura integrados", escribe Suzanne en un texto que publicó en Edutopia.
Los cómics matemáticos ayudan a visualizar los problemas
Al desarrollar problemas matemáticos, pasa a menudo que algunos estudiantes no comprenden lo que se debe desarrollar. "Solía ser un proceso muy frustrante en el que representaba el problema, lo bosquejaba o lo leía frase por frase con pausas, para comprobar si se entendía lo que se pedía", cuenta la profesora.
Desde la frustración, Suzanne descubrió que si lograba enfocar la instrucción de forma ordenada, destacando palabras claves y lo más importante: con apoyo visual, seguramente iba a ser más claro el problema que había que resolver. "Las imágenes y las características de apoyo en las novelas gráficas, ayudan a los estudiantes a visualizar texto que contiene vocabulario o situaciones desafiantes y/o desconocidas. El formato de estilo cómic tiene el beneficio adicional de dividir la información en distintos marcos visuales. Esto hace que la información sea más fácil de recordar, llama la atención sobre eventos separados y resalta el paso del tiempo", explica.
Un ejemplo que deja Suzanne en Edutopia es uno que ha usado con estudiantes de 5to grado, en Nueva York: "Mark divide un viaje de 9 horas en 3 segmentos. Conduce dos horas y media antes de detenerse para almorzar. Después de conducir un poco más, se detiene para cargar gasolina. Si el segundo segmento de su viaje fue 12/3 horas más largo que el primer segmento, ¿cuánto tiempo condujo después de detenerse para cargar gasolina?".
La redacción del problema descrito en el párrafo anterior, puede resultar difícil para los estudiantes que tienen dificultades de comprensión lectora. La propuesta de la profesora, fue entonces repensar el problema y quizá cambiar el contexto, para hacerlo más simple al desarrollar cómic. También es clave pensar en temas que puedan ser más cercanos, para facilitar el proceso de compresión.
"En lugar de una narración breve en un contexto de algo que desconocen –como conducir por horas un auto–, trato de buscar algo más relacionada a sus vidas. La clave está en transformar el problema en algo que puedan relacionar en un formato visual, que asocian con el disfrute y que esperan comprender plenamente", comenta la profesora.
La compresión lectora está muy ligada con la motivación
Entendemos mejor lo que leemos cuando estamos motivados para leerlo. Esa es una premisa con la muchos docentes, alrededor del mundo y de distintas materias, trabajan. Pero, cuando se refiere a la matemática, la lectura de problemas matemáticos no es algo que sea muy atractivo para muchos. Por esa razón, Suzanne apuesta tanto por los cómics matemáticos.
El formato de cómic es menos intimidante y más agradable al momento de la lectura. Al menos así ha experimentado la profesora, quien en algunas pruebas ha dejado problemas matemáticos con caricaturas y otros, solo escritos. El resultado: la mayoría de los estudiantes resuelven solamente los que son presentados en cómic.
¿En qué plataforma se pueden trabajar estos cómics matemáticos?
Suzanne tenía varios años experimentando con herramientas para hacer los mejores cómics, sin ser ilustradora o diseñadora. Pero, después de leer un artículo de The New York Times, sobre la creación de cómics digitales, empezó a experimentar con Pixton. "Permite a los usuarios sin talento artístico crear cómics de aspecto profesional en cuestión de minutos", cuenta la docente.
Pixton cobra una tarifa de suscripción, pero tiene muchas opciones con su amplia galería de imágenes. Además, permite ajustar colores de piel, peinados, ropas posturas y mucho más. Para los profesores que quieran experimentar con los cómics matemáticos en plataformas gratuitas, estas son algunas opciones:
Así, Suzanne transformó los problemas matemáticos, en divertidas y coloridas historias. ¡Una gran estrategia para motivar con los números!
Muy buen artículo.
Pero me hubiera gustado ver varios ejemplos.
Aún así lo pondré en práctica.
Gracias..✔
¡Hola, Eduardo! Recibido el comentario. Lastimosamente, la profesora no dejó más ejemplos, sino el que pusimos. Igual, la explicación nos encantó 😀
Buenas noches .. más información
Bueno pero no entiendo muy bien
¡Hola! Muchas gracias por el interés 🙂 ¿Qué es lo que no entiende?