Con el fin de sobrellevar la pandemia la Fundación AraucaníaAprende implementó una iniciativa que permite a los/as niños/as aprender a leer, a pesar de la falta de conectividad: GraphoMóvil.
Debido a la emergencia sanitaria la mayoría de los contenidos educativos se encuentran en plataformas digitales, y no todos/as los/as estudiantes tienen el mismo acceso a estas.
En la Araucanía, región más pobre de Chile de acuerdo a la encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2017, los estudiantes se estaban quedando atrás y, con la convicción de que el aprendizaje de la lectura abre oportunidades, la Fundación AraucaníAprende llevó el proyecto GraphoMóvil, un furgón bien equipado, a alumnos de primero y segundo básico de establecimientos rurales.
GraphoMóvil está basado en el videojuego llamado “GraphoGame”, desarrollado en Finlandia y validado en Chile por la Pontificia Universidad Católica de Chile. Entre el Ministerio de Educación y AraucaníAprende, se identificaron a los/as niños que necesitaban que se les llevara la escuela a la casa.
La Fundación AraucaníAprende puso a disposición un furgón escolar equipado con teléfonos celulares
El furgón viaja hasta los hogares de los/as alumnos/as de la escuela El Crucero, del sector Tromén Mallín. Así, logra brindar accesibilidad al aprendizaje a niños y niñas que sin conexión a Internet y con sus establecimientos educacionales cerrados habían dejado de aprender.
GraphoMóvil es una forma equitativa de proporcionar aprendizaje, posee equipamiento para que los estudiantes jueguen, un manual para estimular el trabajo lector en el hogar y, además, una biblioteca móvil que deja libros en préstamo en cada casa.
La ruta educativa del GraphoMóvil se repite 2 a 3 veces por semana y tiene 3 ejes fundamentales:
1. Aplicación para el aprendizaje:
En esta dinámica donde el aprendizaje lector inicial se transforma en una rutina de juego-aprendizaje para los/as estudiantes. GraphoGame es un programa que se puede utilizar en un celular o tablet (Android o IOS) y, en una dinámica de videojuego, se puede oír el sonido de una letra e identificar su forma.
Además, el videojuego ofrece unidades léxicas cada vez más grandes, desde letras, sílabas, hasta palabras. El juego permite adaptar la dificultad, en la medida que se aprenden una secuencia de estímulos.
“Seleccionamos GraphoGame como recurso tecnológico porque se requieren solo 24 sesiones de 15 minutos para lograr un aprendizaje clave en el proceso lector”, explicó el Director Ejecutivo de Fundación AraucaníAprende, Carlos Dreves.
2. Experiencias del apoyo a las familias
Al permanecer las escuelas cerradas, las visitas del GraphoMóvil han sido un gran apoyo para las familias que durante la pandemia deben reforzar los aprendizajes de sus hijos en el hogar. Bajo el contexto nacional, es necesario que los recursos no sean un impedimento para que los alumnos/as sigan aprendiendo.
Es de gran ayuda que lleven los recursos a las casas, además de ser un apoyo para los/as padres y madres que deben cumplir otras tareas.
“En este momento es mejor que traigan a mi casa la ayuda para que mi hijo aprenda a leer. Él está teniendo respuestas a sus ganas de aprender. Ahora está motivado y quiere aprender porque se divierte”, afirmó una apoderada de la Escuela El Crucero, Deysi Canio.
3. Intervención educativa guiada
Los/as estudiantes con acceso al videojuego, son guiados por una profesional de la educación, que en sesiones de juego de 15 minutos , generará una experiencia educativa que fortalecerá el aprendizaje lector.
La mayoría de los/as estudiantes prestan más atención al utilizar un aparato tecnológico al aprender, por lo que este método hace crecer su motivación por aprender.
“El Graphogame es para ellos un juego nuevo, lúdico, que les permite mantener su concentración en el tiempo requerido de aprendizaje”, indicó la profesional de Fundación AraucaníAprende, Damaris Rojas.
De esta forma, Fundación AraucaníAprende está realizando una contribución educativa para terminar con las limitaciones de acceso a la educación y en este caso, en lo que respecta al aprendizaje de la lectura.
Desde la fundación se proyecta extender esta iniciativa a otras escuelas rurales, de manera que AraucaníAprende sea capaz de transferir la experiencia a otros establecimientos rurales y, de este modo, muchas más escuelas puedan ejecutar esta iniciativa de forma autónoma, con el apoyo de la fundación.
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