Cosas tan pequeñas pero significativas como esta, pueden marcar una diferencia en la forma como los estudiantes se enfrentan al día a día.
Miriam es profesora de inglés en primaria. Además de su rol como docente en el aula, esta maestra se ha dedicado a compartir sus experiencias pedagógicas e ideas con otros profesores. Lo hace a través de su sitio web “Mi Rincón Favorito” y por medio de sus redes sociales. Simples, realizables y muy fáciles de implementar en cualquier contexto… así son las ideas y recursos con los que nutre sus redes esta profesora.
Recientemente, Miriam compartió una iniciativa sencilla pensada para motivar a cada uno de sus estudiantes.
La profesora marca los lápices de sus alumnos con mensajes positivos y motivacionales. Según explicó en su publicación de Instagram, esto lo hace de forma frecuente. Cada dos mes se le entrega a los niños lápices nuevos y en cada entrega, la profesora vuelve a marcarlos con frases diferentes. “¡Lápices nuevos para mis niños de clase! Les ha emocionado, cada uno con su mensaje para animarles cada día… porque a veces nos cuesta decir las cosas y todos necesitamos que nos digan algo bonito”, comentó la profesora en su publicación.
Otros profesores destacaron la sencilla iniciativa y aprovecharon el espacio de las redes para compartir sus propias versiones de la idea.
“Todos los recursos y estrategias son viables mientras signifiquen estímulos, motivación y facilitación del aprendizaje de los alumnos ¿no? ¡Bueniiisimo!”, comentó la usuario kukysimonarronade. Por su parte, otra docente llamada Monica Floreta, aplaudió la idea y compartió la adaptación que han hecho en su escuela: “Bravo. En la reunión de padres de inicio de curso, esta fue la propuesta que hicimos junto a ellos. Después de la reunión, lo padres escribieron una frase para su hijo y nosotras la pusimos en los lápices. A la mañana siguiente cada niño tenía su lápiz con una frase de sus padres. Si no habían venido a la reunión, como lo decían con tiempo, hacían la actividad previamente. Es muy bonito”.
En efecto, la idea es sencilla, pero puede tener un gran efecto en la manera como los niños se enfrentan al aprendizaje todos los días. Es una pequeña motivación extra para animarlos a aprender y una invitación a conectarse con la profesora para vivir la experiencia de estar en el aula de una manera realmente positiva y saludable.
¿Quieres más ideas simples para el aula? ¡No olvides leer esta nota!
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