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Por su aporte y visión a la educación de los niños, el italiano Francesco Tonucci (Frato), se ganó el título de “niñólogo”.

Acerca del aprendizaje
Fecha: 15 octubre, 2019

Frato: el psicopedagogo y dibujante que entiende muy bien a los niños

A Francesco Tonucci, mejor conocido como Frato, no le gustaba la escuela. En su infancia, cuenta en una entrevista con El País, todos los niños estaban tristes, él estaba triste. Después, se convirtió en adulto y pensó que quería vengarse de su experiencia, quería enfrentar una batalla para defender a los niños, defender la educación que reciben. Bajo esta premisa se convirtió en profesor, investigador, psicopedagogo, y posteriormente, empezó a caricaturizar la realidad de las escuelas a través del dibujo. Sus tiras cómicas se convirtieron en un alegato a favor de la independencia mental de los niños y su principal objetivo como experto y artista se centró en entenderlos a ellos, dejando atrás patrones preestablecidos por los adultos. Por su visión, Frato se ganó el título de “niñólogo”.

En sus investigaciones y viñetas, Frato estudia los procesos de aprendizaje de los niños y las niñas y su relación con el entorno. También aborda el papel de los adultos en la educación. El pedagogo es crítico y a menudo reflexiona sobre expresiones orientadas al futuro de los estudiantes; frases como: “cuando seas mayor lo entenderás”. Esto, dice él, nos lleva a limitar todas sus posibilidades, opiniones e inquietudes.

Dibujo de Frato

 

De su apuesta educativa y visión, hay nueve puntos claves que se podrían destacar:

1. Escuchar: Tonucci dice que se debe escuchar a los alumnos, confiar en ellos y en sus competencias. Sobre todo, porque incluso ahora, son los niños los que escuchan a los maestros, y debería ser al contrario.

2. Escuelas democráticas no igualitarias: con respecto a este punto, Tonucci cree que es fundamental formar a los estudiantes como ciudadanos libres y soberanos. Se debe dejar de lado el esquema tradicional donde el profesor es el único que tiene los conocimientos.

3. Los profesores: los estudiantes llegan a la escuela con conocimientos previos, explica Tonucci, y el profesor debe tener la capacidad de potenciarlos y desarrollarlos, especialmente a través de la motivación.

4. La diversidad: también habla de la diversidad como una ventaja que se debe aprovechar en el aula.

5. Participación activa: los niños, afirma el profesor, deben participar de forma activa en la organización de la escuela y en la toma de decisiones.

6. Enseñar según los intereses: para enseñar es necesario tomar aquello que los niños conocen, lo que les interesa. Además es clave, dice el pedagogo, potenciar sus fortalezas y capacidades.

7. Los mejores profesores: Tonucci dice que los grandes docentes escuchan a sus estudiantes, buscan la excelencia, personalizan el aprendizaje, promueve el trabajo en grupo y no la competencia.

8. La lectura: para él, la lectura en voz alta en el aula debería ser obligatoria, ya que es una de las herramientas educativas más eficaces.

9. El juego: el ocio y el juego son vitales. Estos dos elementos, explica, influyen de forma positiva en el proceso de aprendizaje.

Otro dibujo de Frato

Estos puntos los ha transmitido de una manera divertida y crítica a través de sus tiras cómicas, obra que apunta a desdramatizar la educación, pero promoviendo la reflexión y el debate.

Cambiar la forma de enseñar, fomentar la independencia de los niños y entender el valor de los profesores; esas son algunas de las reflexiones que ha impulsado a través de sus trazos y mensajes. Particularmente con respecto a los docentes, Tonucci ha destacado la importancia de la labor que desempeñan y ha dejado claro que son ellos, la clave para impulsar cambios y mejoras. “No necesitamos ni buenas ni nuevas leyes de enseñanza. Necesitamos buenos maestros. Si alguien puede cambiar la escuela es el maestro”, comentó en una entrevista con El País. El psicopedagogo defiende a los profesores, asegura que su trabajo es irremplazable, y por ende, debe estar a la altura de las expectativas de los niños.

¿Y qué necesitan los niños? Necesitan ser escuchados, realmente escuchados, dice Tonucci. “Tenemos que demostrarles que nos interesa lo que piensan. Porque si les preguntamos banalmente lo que piensan, como son listos, nos dirán lo que creen que queremos oír”, explica. Ellos son sujetos de derecho y la educación tradicional, dice el profesor, ha planteado lo contrario. Y eso es lo que hay que revertir para mejorar la forma de enseñar.

Un dibujo de Frato

Y con sus tiras cómicas, él apunta a esto.

Todos sus dibujos son el resultado de la investigación, no son opiniones personales. Son el fruto de su conocimiento, de un trabajo que se basa en datos, observación, análisis de experiencias. Pero en un lenguaje sencillo, las ideas de este “niñólogo” pasan a ser la mejor herramienta para repensar la forma de enseñar y entender la importancia de convertir el aprendizaje en algo realmente estimulante para niños y niñas.

Uno de los dibujos de Frato

Fuentes: El País / La Obra de Tonucci