Por cuarto año consecutivo, el estudio que analiza la valoración de las profesiones en Chile muestra cómo los docentes se posicionaron sobre dentistas, ingenieros comerciales o psicólogos.
“Según su opinión, ¿cuál es la profesión más valorada en Chile?”. Frente a esta pregunta abierta –que se realiza por quinto año consecutivo en el Índice Elige Educar– la profesión docente se ha consolidado como la cuarta mejor evaluada por los chilenos desde 2015.
En este último sondeo desarrollado por Elige Educar y GfK (Growth from Knowledge), donde fueron encuestadas más de mil personas de Santiago y regiones, los docentes solo se ubicaron bajo los doctores, ingenieros y abogados, profesiones que históricamente han sido destacadas por la ciudadanía.
“Esta mejora sostenida en la valoración de los profesores es muy importante ya que reconoce la importancia de esta profesión en el desarrollo de nuestra sociedad. Como muestra la evidencia, en los países donde los docentes son altamente valorados, se logra atraer a más y mejores postulantes a las carreras de Pedagogía. Este es un factor clave para la calidad educativa”, plantea Joaquín Walker, director Ejecutivo de Elige Educar.
Respecto a la mirada de la ciudadanía frente al rol de los profesores, 5 de cada 10 chilenos cree que el nivel de esta profesión es cada vez mejor.
Esta cifra aumentó más de 10 puntos porcentuales desde la primera vez que se llevó a cabo la encuesta en 2009. Del mismo modo, según esta medición, un 76% de los encuestados apoyaría a su hijo o hija a que estudie Pedagogía.
Sin embargo, este nivel de acuerdo disminuye en más de 10 puntos porcentuales en el caso de que sus hijos obtuviesen más de 600 puntos en la PSU. Es importante subrayar que, a menor nivel socioeconómico, incrementa el interés por convertirse en profesor o educador de párvulos (educador infantil), o que sus hijos estudien Pedagogía.
Si bien, la mirada en Chile sobre a la estabilidad laboral de los profesores y sus remuneraciones sigue teniendo un bajo apoyo –con un 33% y un 21%, respectivamente–, este nuevo índice ratifica un aumento progresivo en ambas áreas desde que se aprobó el proyecto de Carrera Docente en 2015.
En la actualidad, un profesor que trabaja 37 horas en un colegio tiene un sueldo de entrada de más de 800 mil pesos bruto y, a su vez, podría alcanzar los 2,5 millones de pesos al llegar a los tramos superiores de la Carrera Docente.
Un 78% de los chilenos cree que los profesores en Chile realizan un aporte a la sociedad mayor al de cualquier profesión.
Si bien, esta cifra disminuyó cerca de siete puntos porcentuales desde la última vez que se llevó cabo esta medición, es relevante remarcar que este índice no considera la opinión de los chilenos después del estallido social. Además, por cuarto año consecutivo, el estudio que analiza la valoración de las profesiones en Chile muestra cómo los docentes se posicionaron sobre dentistas, ingenieros comerciales o psicólogos.
Otro de los desafíos pendientes de esta medición es seguir aumentando el porcentaje de atracción de jóvenes a estudiar Pedagogía o Educación de Párvulos. En este sentido, un 52% de los chilenos estaría interesado a que él o su hijo o hija estudie para ser profesor, mientras que un 46% estaría de acuerdo con estudiar o que su hijo o hija estudie Educación de Párvulos.
Dentro del análisis de los últimos 10 años, en el caso de los profesores, el porcentaje alcanzó su mayor porcentajes en 2017, cuando un 62% de los encuestados –considerando tanto a padres como jóvenes– estuvo interesado con estudiar o con que sus hijos estudien Pedagogía. Sin embargo, el interés por estudiar educación de párvulos ha estado estancado desde su primera medición como carrera individual, que se realizó en 2012.
“En un contexto de crisis como el que vivimos hoy, los docentes son quienes más impactan en el aprendizaje y desarrollo socioemocional de los niños y niñas. Es por ello que es importante que la ciudadanía reconozca a los profesores como agentes de cambio, considerando que un docente impacta en promedio en 5 mil estudiantes en su carrera. Ésta es una medición que se realizó previa al estallido originado el 18 de octubre, por lo que es posible que mejore aún más la percepción sobre el aporte a la sociedad de los docentes en la próxima encuesta”, concluyó Joaquín Walker.
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