Tamara es una pequeña niña aficionada al ballet. Un día, su madre la encuentra bailando al ritmo de su caja de música. Después, algo inesperado y conmovedor sucede.
Su nombre es Tamara y es aficionada al ballet. Su cuarto está lleno de pósters de bailarinas, sus libros cuentan historias de grandes bailes y su oso de peluche, tiene guardado uno de sus objetos más preciados: la llave que abre una caja de música. En aquella caja, una pequeña bailarina dorada gira una y otra vez mientras Tamara la contempla. Siguiendo los pasos de la bailarina, la pequeña niña gira, se pone en puntas de pie y se mueve al ritmo del sonido que emite la pequeña caja de música. En silencio, su madre la observa con una sonrisa en la cara…
Luego, algo inesperado sucede.
La caja de música se detiene, Tamara continúa bailando y el rostro de la madre se transforma; no puede contener las lágrimas al darse cuenta de que su hija no percibe lo que ella percibe… Emocionada e ingenua en el mejor sentido de la palabra, la niña corre hacia los brazos de su madre quien recuerda que en lugar de llorar necesita seguir apoyando a su hija por encima de cualquier cosa…
Tamara siguió bailando cuando la música se detuvo porque simplemente no podía oírla. Ella siguió bailando porque a pesar de ser sorda, sentía la música en el corazón y sentía el apoyo de su madre quien con lengua de señas le dijo estas palabras: “baila hasta que las estrellas dejen de brillar”. La niña, agradecida, le responde con sus manos y la invita a bailar.
El sueño de Tamara es ser bailarina de ballet y aunque su madre siente el inevitable dolor de cualquier madre que sufre por la discapacidad de su hija, ¡la apoya!
La apoya por encima de todas las circunstancias y al hacerlo, releva la importancia de potenciar todas las habilidades de los niños y desarrollar en ellos la confianza necesaria para que persigan sus sueños. En tan sólo 3 minutos, el director del corto –Jason Marino–, conmueve con un potente mensaje que le da valor a las habilidades, al esfuerzo, a las ganas, a la superación, pero sobre todo, al rol del adulto (padre o profesor) que apoya y cree en el talento y en las habilidades de aquellos niños que en procesos de formación indicados, pueden superar incluso sus propias expectativas para llegar tan lejos como ellos quieran.
Tamara
Este es uno de los cortometrajes más aleccionadores y emotivos que he visto. Realmente nos hace ver cómo uno se puede motivar para lograr algo a pesar de lo adverso de las circunstancias.
Este cortometraje es muy bonito, pero también me gustaría recalcar que lo podían haber subtitulado, y precisamente se trata de un colectivo con problemas de audición, me llamó la atención que no lo subtitulen y no lo hagan inclusivo, pero pese a eso… es precioso y conmovedor
Hola, Ana. Lastimosamente no lo encontramos subtitulado :(. Gracias por el comentario.
Tengo un hijo hipoacúsico profundo y el video me pareció precioso. Comparto el comentario de Ana y agrego: creo que no se refiere solo a las palabas, sino que lo que necesitaría ser subtitulado es justamente lo que para los oyentes resulta evidente. Sería importante que tenga subtítulos que comenten cuándo está sonando la música y cuándo se detiene, para que personas hipoacúsicas y sordas también accedan al mensaje. Gracias!
Divino. Por muchos cortos así.
Es que no hay nada que subtitular, ya que lo poco que hablan lo hacen en lengua de señas 😃 está muy bonito el cortometraje.
Saludos.
Los primeros en aprender somos los padres y nos hace falta algo así, enseñarle a nuestros hijos a creer y a soñar con el alma. Enseñanza desde el ser es maravilloso yo estoy feliz y este cortometraje hace que ame mucho mas enseñar. Gracias
felicidades por la sensibilidad, pero es importante saber que el sordo no oye, pero sí percibe las vibraciones, de ahí que si existen bailarinas sordas. Saludos.
Hermoso mensaje ,estimula a no detenerse a intentar todo lo que nos proponemos y a no dejar que nada nos impida soñar y concretar anhelos.
Holaa es así con estos chico que tienen ese grado de discapacidad me siento como mamá muy identificada
Claudia
Tengo un hijo hipoacúsico profundo y el video me pareció precioso. Comparto el comentario de Ana y agrego: creo que no se refiere solo a las palabas, sino que lo que necesitaría ser subtitulado es justamente lo que para los oyentes resulta evidente. Sería importante que tenga subtítulos que comenten cuándo está sonando la música y cuándo se detiene, para que personas hipoacúsicas y sordas también accedan al mensaje. Gracias!
Trabajo en educación y es un material a compartir con red de escuelas. principalmente, en que se relaciona a convivencia escolar e integración socioemocional.
Precioso!!!