Ranjitsinh Disale fue el ganador del Global Teacher Prize 2020, quien ha transformado a toda una comunidad gracias a su gran trabajo como docente. Aquí cuenta algunas lecciones para lograrlo.
Ranjitsinh Disale tiene una declaración de principios, que ha repetido en cada entrevista que ha dado desde que se convirtió –en diciembre de 2020– en el ganador del Global Teacher Prize: “Como maestros, nos tenemos que enfocar más en los estudiantes y en sus experiencias de aprendizaje; escucharlos e ir mejorando nuestros métodos de enseñanza”.
Bajo esa premisa y con la idea de que los estudiantes son los principales –y más importantes– editores de una clase, Ranjitsinh fue parte de un encuentro virtual, que se realizó el 9 de junio y que sirvió para que compartiera con miles de docentes chilenos, sus principales lecciones o recomendaciones para enfrentar los procesos de enseñanza, a pesar de las dificultades.
El encuentro con Ranjitsinh también sirvió para iniciar la campaña de una nueva edición del Global Teacher Prize Chile. Por sexto año consecutivo, la invitación es a nominar a esos docentes que han estado más presentes que nunca o postular, si eres docente y quieres que tu trabajo sea reconocido por millones de personas.
De ese gran encuentro virtual, sacamos estos 6 consejos que pueden ser útiles para cualquier docente del mundo:
1. Entender el contexto de cada estudiante
Ranjitsinh llegó en 2009 a la escuela primaria Zilla Parishad, ubicada en Paritewadi, una pequeña aldea de India, donde no es costumbre que las niñas vayan al colegio, porque son obligadas a casarse desde muy jóvenes. El profesor cuenta que cuando llegó, no asistía ni una alumna y le tocó ir puerta a puerta, para conocer cada realidad.
“Después de 6 meses, en que estuve pasando todos los días para insistir que los niñas tenían que ir al colegio y para entender los distintos contextos, los padres empezaron a llevarlas a la escuela. Pero tuve problemas de comunicación, porque todos hablaban dialectos distintos al mío”, recuerda el profesor.
En el proceso de ir adaptando sus estrategias en función de las necesidades, vio los grandes beneficios que le daba cambiar sus contenidos en función de las necesidades de la escuela y sus estudiantes.
2. ¡La tecnología es una GRAN aliada!
La mayoría de las estudiantes de Ranjitsinh venían de comunidades tribales y el plan de estudios no estaba adaptado al idioma principal de sus estudiantes, el kannada. Entonces, después de un largo periodo de aprendizaje –en que el profesor aprendió la lengua tribal– adaptó todo los libros y agregó códigos QR a cada página, que incorporan audios con historias y muchas otras actividades, para complementar y lograr que el contenido sea más dinámico.
“La pandemia nos ha enseñado lo importante que es la tecnología, para que los niños puedan seguir aprendiendo. Además, con la tecnología ayudo a mis estudiantes a aprender por su cuenta; esa es la gran herramienta que brinda la tecnología”, asegura el mejor profesor del mundo.
Ranjitsinh hace especial hincapié en que la tecnología hay que adaptarla según el contexto de cada escuela y en base a eso, trabajar. Por eso, él optó por los códigos QR, para poder realizar lecciones dinámicas a través de los libros creados por él y que de esta forma, sus estudiantes sigan aprendiendo a pesar de los problemas de conectividad que puedan tener.
3. Estudiantes, padres y docentes, son los pilares de la educación
“En mi escuela, fue clave el apoyo de los padres para el aprendizaje de mis estudiantes, especialmente en un contexto como el que he contado. Si los familiares no se comprometen con la educación de sus hijos, no importan mis esfuerzos”, asegura Ranjitsinh.
Por eso, para Ranjitsinh ha sido clave trabajar siempre a la par con las familias y hacerlos parte de los procesos del aprendizaje. El profesor menciona que algunas veces, la escuela también se ha convertido en un espacio de aprendizaje para ellos y –especialmente– para él, como docente. Esa comunicación ha sido clave para enfrentar de mejor manera cada una de sus lecciones.
4. Enseñar a los estudiantes cómo aprender
“No era un buen estudiante, no me gustaba quedarme dentro de la clase leyendo un libro o sentado, me gustaba estar afuera, haciendo cosas y a los profesores no les gustaba que yo preguntara mucho. Siempre estuve interesado en aprender nuevas habilidades y cuando decidí ser profesor, quería cambiar lo que yo había experimentado en los colegios”, cuenta Ranjitsinh.
Por esa experiencia personal, este profesor siempre ha tenido como meta que sus estudiantes no lo consideren a él como el único recurso de conocimiento que existe en la escuela. Bajo esa filosofía, Ranjitsinh considera que es más valioso entregar todas las herramientas necesarias para aprender por cuenta propia, que seguir las instrucciones estructuradas de una clase. Además, eso le entrega libertad de aprendizaje a cada alumno/a, según el ritmo de cada uno/a
“Yo no me enfoco en enseñarles algo, sino en cómo aprender cosas”, puntualiza Ranjitsinh.
5. ¡Es clave crear experiencias de aprendizaje y así incentivar la creatividad!
“Motivar a la creatividad siempre es necesario para que los estudiantes quieran seguir asistiendo a la escuela”, asegura el docente. Según su experiencia, eso es algo que se logra si cada contenido se convierte en una experiencia, no en un material que hay que revisar frente a una pizarra, viendo una película o revisando un texto, la idea siempre es ir un poco más allá.
Unas de las experiencias que mostró Ranjitsinh, fue la creación de un pasaporte donde cada estudiante puede registrar fechas, preguntas, aprendizajes y más, sobre algún lugar sobre el que quisieron investigar. Además, este pequeño cuaderno, sirve para que cada estudiante lleve registro de lo que ha aprendido, de una forma distinta.
Para poder crear estas experiencias, el profesor también señala que como él no es experto en todos los contenidos, apoyarse en otras personas o profesores, ha sido clave para diseñadores mejores instancia de aprendizaje, en donde se logren desarrollar aprendizajes que tengan que ver con múltiples materias.
6. Las preguntas y los errores: ¡se deben celebrar!
“Me gusta que mis estudiantes hagan las preguntas y decidan qué es lo que quieren aprender, según sus necesidades, lo que les da curiosidad, siempre desde sus experiencias y me gusta incentivar a hacer muchas preguntas (...). Lo mismo pasa con los errores, siempre se los celebro, porque les digo que ese error es una nueva oportunidad para aprender”, cuenta Ranjitsinh.
Gracias a estas experiencias de aprendizaje que ha creado gracias a estos consejos que explicó, en la aldea ya no existe matrimonios adolescentes, 100% de las niñas asisten a la escuela y varias estudiantes han cursado carreras universitarias. ¡Una gran muestra sobre lo importante que es escuchar y entender las necesidades de los estudiantes!
Felicidades. Gracias por compartir esta experiencia. Estaré atenta a más publicaciones del profesor Ranjitsinh