Amabilidad, una palabra que la Real Academia Española define como “cualidad de amable”, que a su vez, significa digno de ser amado o adjetivo de afable, complaciente y afectuoso. Cualidades importantes para lograr un ambiente escolar libre de bullying, donde el compañerismo esté siempre presente.

Por eso queremos compartirles algunas ideas que publicó Edutopia para fomentar la amabilidad de forma entretenida y para todas las edades. Aquí les dejamos 3 que se pueden aplicar desde el primer día de clases tras las vacaciones:

1. ¡Un frasco lleno de buenas acciones!

En la escuela John C. Haines, en Chicago, los estudiantes colocan una pelota chica en un frasco cuando hacen algo bueno por sus compañeros y luego describen la acción a la clase.

Una gran invitación que se puede realizar, desde el primer día, es pedirle a los estudiantes que articulen su amabilidad y que trabajen de forma colaborativa para llenar el frasco; cada profesor puede decidir con qué llenarlo. Esta es una forma de reforzar la cultura colaborativa y positiva en el aula. Una vez que el frasco esté lleno, toda la clase podrá celebrar con un regalo especial o una fiesta.

2. Las aplicaciones pueden ser grandes aliadas

¡Ahora todos los estudiantes están conectados a través de sus celulares y se divierten con aplicaciones! Esto se puede aprovechar buscando aplicaciones que ayuden a fomentar la amabilidad. En Edutopia, recomiendan la aplicación gratuita Nobly, que funciona como una plataforma para que los usuarios graben y compartan sus buenas acciones.

La aplicación conecta actos amables a través de etiquetas llamadas "cadenas", que permiten a los estudiantes ver cómo sus acciones influyen en que otros. ¡Es como una red social que promueve el ayudar a otros!

3. Las tareas se pueden reemplazar por actos de amabilidad.

Una escuela en Cork, Irlanda, Gaelscoil Mhichil Ui Choileain, reemplaza las tareas con actos de amabilidad durante todo un mes. Cada día de la semana tiene un tema: los lunes, los estudiantes ayudan a una persona mayor; los martes, deben ayudar a sus padres con alguna tarea del hogar; los miércoles, encuentran un ‘acto de bondad al azar para realizar', y los jueves, se centran en el autocuidado, realizando algo que los haga sentir bien con ellos mismos.

Durante la semana, los estudiantes dejan observaciones a sus compañeros en un "cubo de amabilidad" y en una asamblea que se realiza los viernes, la escuela comparte algunas de las experiencias. Durante todo el mes, los estudiantes documentan y reflexionan sobre sus acciones de distintas formas, según los requisitos del profesor y sus ideas. ¡Una gran iniciativa para replicar!