En una escuela en Hong Kong, los estudiantes de Cesar Harada se basan en problemas reales, como los plásticos en el océano, para aprender y pensar en ideas que generan un impacto real.
Cesar Harada es profesor en una escuela de Harbour, Hong Kong. Enseña Ciudadanía e Invención y con ideas absolutamente innovadoras basadas en problemas locales reales, está cautivando a sus estudiantes con la ciencia y generando un aprendizaje que sin duda trasciende la sala de clase. Sus proyectos son numerosos, pero Harada empieza contando que junto a sus estudiantes de 6 a 15 años, salen a caminar por las playas para limpiarla, recolectando la basura que hoy, tristemente termina en un 80% de los océanos. Teniendo en cuenta que recolectar basura con buques y analizar las muestras es lento y costoso, junto a sus estudiantes, Harada sueña con inventar otras formas de entender el problema y hacer frente a éste.
Por proyectos como éste de la recolección de basura, el aula de este profesor se ha convertido en un pequeño taller.
Allí tiene mesitas de trabajo con altura ajustable diseñadas especialmente para que todos puedan participar sin problema. Una vez recolectado el plástico de las playas, lo reducen al tamaño en que usualmente se encuentra dentro del océano (un tamaño muy pequeño, debido a su fragmentación). A partir de un ejercicio como este, lo que hace el profesor después es simplemente dejar volar la imaginación de sus alumnos. “Mi trabajo es tratar de tomar las mejores ideas de cada niño y tratar de combinarlas en algo que esperamos que funcione”. En este caso en particular, decidieron entre todos que no iban a recolectar más basura pues querían dedicarse a recolectar información; así nació un “prototipo” creado a partir de lámparas y cámaras web, una especie de robot flotante que se mueve por el agua y captura fotos del plástico que flota allí. A través de un sensor, las imágenes son procesadas en un computador donde se mide el tamaño de las partículas plásticas para obtener así una estimación aproximada de la cantidad de plástico en el agua.
Pero más allá de la complejidad de crear un robot o recolectar imágenes de partículas de plástico, lo más rescatable del trabajo de este profesor es la forma cómo surge.
“Lo genial en este proyecto es que los estudiantes vieron un problema local, y pum, están tratando de solucionarlo de inmediato”, afirma Harada. Las iniciativas de este profesor surgen de los intereses de los estudiantes, intereses que buscan solucionar problemas 100% reales. Además, asegura el profesor, sus alumnos son niños muy informados, ven noticias, consultan internet y se inspiran en cosas que ven para crear cosas en clase y aprender. Por ejemplo, un día encontraron la imagen de un niño de menos de 10 años limpiando un derrame de petróleo utilizando las manos (en Sundarbans, la selva manglar más grande del mundo en Bangladesh). Los niños se quedaron perplejos pues notaron que esa agua era la misma que ellos beben, la misma con la que se bañan y básicamente, la misma con la que viven. Una vez más, basados en un problema real, construyeron el prototipo de un espectrómetro con un sensor, un instrumento que alumbra a través de toda clase de sustancias que producen espectros diferentes, lo que puede ayudar a identificar lo que hay en el agua. Un vez hecho éste, lo mandaron a Bangladesh.
“Lo genial de este proyecto es que más allá de resolver un problema local, o de analizar un problema local, mis alumnos usaron su empatía y su sentido de la creatividad para ayudar de forma remota a otros niños”, dice Harada.
“Necesitamos su imaginación”
En esta charla TED, además de compartir los proyectos sociales y ambientales que ha llevado a cabo con sus estudiantes, Harada deja claro que hoy en día es indispensable compartir con nuestros niños lo que está pasando en el mundo, compartir la realidad sin ataduras, sin intentar protegerlos y por una sencilla razón: necesitamos su imaginación para crear soluciones. Es entonces, la misión de los educadores, preparar a la siguiente generación para que ellos puedan desde ahora, en las salas de clase, cambiar el mundo.
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