Grandes reflexiones de vida nos entrega la joven pakistaní Malala Yousafzai, quien alentada por su padre, lucha por el derecho a la educación infantil.
Durante años, luchó en un blog con un pseudónimo a favor de la educación de las niñas en Pakistán dominado por los talibanes, pero la vida de Malala cambió radicalmente al ser la persona más joven en ganar el Premio Nobel de la Paz en 2014.
La paquistaní de 22 años lucha por la educación y tiene grandes reflexiones sobre la vida que pueden inspirar a tus estudiantes. Además, se ha convertido en una de las voces más fuertes de la educación infantil, especialmente de las mujeres donde el extremismo por una religión les impide acceder a la educación.
El atentado que Malala sufrió en 2012 hizo que tuviera una forma distinta de ver la vida
Cuando iba saliendo de su escuela, en el Valle del Swat al norte de Pakistán, los talibanes le dispararon a muerte; un hecho que la ayudó a pasar del anonimato en internet a una lucha frontal por la educación ante presidentes y foros mundiales como el de las Naciones Unidas.
Su mensaje y su lucha ha resonado en las escuelas, mujeres y niñas de todo el mundo. Por eso, te compartimos 9 reflexiones de sus discursos y del libro “Yo Soy Malala”.
- Se debe ser humilde, compasivo y agradecido.
- No vivir con odio ni buscar venganza traerá increíbles beneficios.
- Hacer todo lo posible por ayudar a los demás.
- Buscar motivación en las tareas diarias y rodearse de personas que nos alienten.
- Nunca nos demos por vencidos ni perdamos la esperanza.
- Aprender de los errores es necesario, porque todos nos equivocamos.
- Fomentar la educación, que es un derecho humano, e invertir en ella generará muchos beneficios para la sociedad en un futuro.
- Confiar en las capacidades de tus estudiantes, porque todos son únicos y tienen algo que ofrecer.
- Animarse a soñar y dejar que los sueños guíen nuestras acciones es la base de vivir con inspiración.
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