Hay miles de profes, educadores y educadoras de párvulo a lo largo del país que desde el aula transforman la vida de sus estudiantes. Pero su influencia no se detiene allí; se extiende mediante su compromiso y pasión por la educación, llegando también a impactar en las políticas públicas que determinan el futuro de generaciones enteras.
Hoy en el rincón bullicioso de una sala de clases, donde una profesora o un profesor se encuentra con un estudiante, es donde se puede identificar un punto de inflexión en la vida de ese niño o niña que perdura a lo largo del tiempo.
En este día nacional del profe compartimos algunas de las historias de docentes que cada día transforman la vida de los niños y niñas desde dentro y fuera de la sala de clases.
“Quiero que sean escuchados los niños de Rapa Nui porque tienen mucho que decir, quiero que sean los artífices de un cambio a nivel nacional”, aseguró Geisha Bonilla, profesora de Lenguaje y Filosofía, actual directora del Colegio Lorenzo Vega de Rapa Nui y una de los 50 semifinalistas de la 8ª edición del Global Teacher Prize internacional 2023.
En el colegio que dirige se formó un gobierno estudiantil donde los estudiantes pueden ser ministros, senadores o diputados, y de esta forma levantar temas que les preocupan. Como resultado, han podido exponer sus inquietudes e ideas en distintos espacios, como al alcalde de la isla y a otras autoridades.
La Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) reconoce el “derecho a la participación”, fundamental en las comunidades educativas cuando se entrega un rol protagónico a los estudiantes en sus aprendizajes. Incentiva sus deseos de aprender, no contenidos inertes, sino aquellos que les permitan desarrollar herramientas que les serán útiles en la vida.
“Participo en iniciativas de política y discusión educativa a nivel nacional e internacional, lo que me ha permitido compartir con personas con las mismas ganas de mejorar la educación. Me he convencido del poder que tenemos los profes de cambiar el mundo”, describió Francisca Elgueta —profesora de Historia— sobre los meses que siguieron al reconocimiento del Global Teacher Prize Chile 2022 por su labor en el Colegio Betania de La Granja, cuyo foco es la reinserción escolar.
Ha sido parte de diversos congresos sobre educación, trabajó como consultora en el Mineduc para la elaboración de un nuevo currículum para educación de personas jóvenes y adultas, y asumió un rol de asesora en la Fundación Súmate —organización con foco en el bienestar e inclusión social de jóvenes y en la disminución de la brecha de exclusión educativa–.
En un estudio de Elige Educar el 84% de los encuestados consideró que los docentes realizan un mayor aporte a la sociedad que cualquier otra profesión (Estudio Índice Elige Educar 2021: Reporte de resultados).
“Los jóvenes son creadores y no hay que dejar que esa energía se vaya. Una forma de darme energía es involucrándoles y pedirles que aporten con creatividad. Eso te hace sentir acompañado en la idea”, explicó Pedro Figueroa, profesor y Magíster en Liderazgo y Gestión Integral para la Transformación Pedagógica.
Forma parte de uno de los diez equipos ganadores del reconocimiento Elige Innovar 2022, premio que destaca proyectos de innovación dentro de comunidades educativas. Su proyecto consiste en que los estudiantes registren sus emociones a través de papeles post-it antes del inicio y al final de cada clase.
El objetivo de la innovación es practicar las capacidades de reconocer y expresar emociones, para aprender a regularlas mejor. Según el equipo educativo que postuló el proyecto, la idea surgió como una forma de tomar acción en la prevención de un fenómeno que estaba ocurriendo en los jóvenes al interior de su comunidad educativa: “Autolesiones y conductas suicidas”.
Según los datos que arrojó el Simce, cuando las y los estudiantes aprenden en espacios de contención emocional, donde se abordan adecuadamente los conflictos y se fomenta el respeto por los demás, pueden obtener mejores resultados (Presentación Resultados Educativos 4° básico y II medio 2022).
Hay miles de profes, educadores y educadoras de párvulo a lo largo del país que están cambiando la vida de sus estudiantes a través de innovaciones pedagógicas al interior de la sala de clases que impregnan la vida de niños, niñas y la escuela donde trabajan con nuevos colores para ver la realidad, pero que también marcan el destino de las comunidades que rodean los recintos escolares.
Otros trabajan fuera de la sala de clases, incidiendo en la elaboración de políticas públicas, desde allí transforman la educación para lograr que niños y niñas tengan una vida con mayores oportunidades. Además, promueven la mejora de las condiciones de trabajo de la comunidad educativa, con el objetivo de atraer y retener a profesionales de la educación.
Este día del profe recordamos que ser profe impacta en que los niños sean protagonistas dentro de la sociedad, en el diseño de políticas públicas y en el bienestar de los estudiantes. Cada día los y las profesoras, así como los y las educadoras de párvulo, cambian el destino de los niños y niñas que habitan este país.
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