Por qué los juguetes en un jardín infantil son más que juguetes

A las 10:30 de la mañana llegaron al Hotel Fundador 30 niños y niñas que venían de San Miguel y La Pincoya (dos comunas ubicadas en Santiago de Chile). Estaban allí para representar a miles de niños en una actividad donde básicamente, sólo tenían que jugar a ser ellos mismos… Todo sucedió en una sala donde había aproximadamente 50 juguetes ubicados en distintos rincones del espacio. Cuando se abrieron las puertas de esta sala, los 30 niños entraron para jugar, para explorar de forma libre. Mientras tanto, un grupo de expertos observaban cómo se relacionaban ellos con determinados juguetes y evaluaban criterios como el nivel de exploración, el tiempo de observación y la cantidad de niños que utilizaban cada objeto.

Elige Educar

Los niños estaban jugando, estaban explorando, estaban siendo niños, pero además, estaban eligiendo el material didáctico que se utilizará en más de 1.000 salas cuna y jardines infantiles de la Fundación Integra. La actividad, diseñada por la fundación, se llama “Feria del juguete”, aunque en realidad es mucho más que eso… La instancia, que se realiza por segunda vez este año, es un proceso que convierte a los niños en protagonistas activos y destaca el derecho que tienen ellos a ejercer una ciudadanía participativa. “Como adultos teníamos dos opciones: seguir comprando y eligiendo los materiales para los niños, o escuchar sus voces… Optamos por lo segundo”, aseguró Marcela Fontecilla, Educadora de Párvulos y Directora Nacional de Educación Integra.

Fundación Integra

De los 50 elementos que había ese día, se eligieron aproximadamente sólo 15 juguetes que se suman a la lista de materiales que ya hacen parte de las aulas.

Pero, ¿por qué es tan importante que los niños los hayan escogido? Porque además de ser los voceros de miles de niños, están eligiendo juguetes que son esenciales en sus primeros años de vida. “Lo importante de que los niños estén en el proceso de adjudicación tiene que ver con escuchar sus voces para poder incorporar lo que ellos quieren y necesitan para aprender. De esta forma los estamos incorporando al mundo, a la vida, como ciudadanos, como seres que tienen voz y voto, y además, como protagonistas de sus propios aprendizajes a través de los materiales que cada niño explora de diferente forma”, explica Carolina Álvarez, Educadora de Párvulos de la modalidad no convencional Mi Jardín al Hospital Del Hospital Carlos van Buren de Valparaíso. Para Carolina y muchas otras educadoras, el material didáctico es prioritario y significa mucho más de lo que podríamos imaginar.

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No sólo son llamativos juguetes, son elementos pedagógicos, objetos a través de los cuales los niños desarrollan múltiples habilidades en un periodo fundamental de su desarrollo.

“Los niños aprenden a través de los sentidos y exploran… exploran los sonidos, el tamaño, la forma, los colores, las dimensiones e incluso leyes físicas cuando tiran cosas y éstas se caen. Además aprenden de las relaciones interpersonales, la comunicación efectiva, el trabajo en grupo, cosas que son fundamentales en la vida adulta y que se deben trabajar desde los primeros años de vida”, explica Carolina. Para esta educadora, lo más importante del material didáctico tiene que ver con la libre exploración y con el juego, por eso, incluso en el hospital donde trabaja, se las ha ingeniado para que los niños que están hospitalizados (desde los primeros años de vida), tengan acceso libre éste material. “En los hospitales, el tema del material didáctico es un desafío”, cuenta Carolina. Los hospitales no están habilitados para los niños, entonces tenemos que llevar el material hacia ellos sin imponer el objeto con el que van a trabajar. Como no podemos llevar todos los materiales, ideamos un catálogo que cumple con los requisitos del hospital (desinfectable, con termolaminado). El niño, a través del catálogo puede elegir el material didáctico con el que quiere trabajar y con base en esto hacemos una planificación posterior, pero siempre teniendo al niño como protagonista”.

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En las salas de los jardines, el material didáctico es tan importante como en el hospital donde trabaja esta educadora.

Y esto sucede porque son infinitos los aprendizajes que se trabajan a través de un mismo material. No hay uno más importante que otro pues, según explica Carolina, todo depende del niño. Para un niño puede ser más divertido lanzar piedras de colores, mientras que otro puede preferir armar una torre con estas mismas piedras. Observar estas acciones, es la mejor forma de entender qué tipo de juegos prefieren y cuál es su forma de aprender, algo que es vital para las educadoras, quienes a diario, deben potenciar las habilidades a través de estos objetos. “Todos los materiales son importantes, desde los más simples, a los más elaborados”, afirma Carmen Ortiz, Educadora de Párvulos del Jardín Bello Horizonte de Rengo (VI Región). Para Carmen, el material didáctico es la base del juego a través del cual se desarrolla la matemática, la expresión y otras cosas como el compartir. “Son infinitas las posibilidades”, dice ella. Además, asegura que todo importa: los colores, las formas, las texturas. “Si queremos trabajar colores, el material debe ser colorido, si queremos trabajar tamaño, el material debe tener diferencias de tamaño, si queremos un ambiente calmo, el material tiene que tener una característica especial, debe ser más neutro, debe ofrecer tranquilidad y así sucesivamente”.

Todo importa en la primera infancia: los bloques de colores, los animales de madera, las pelotas, los sonajeros, las piedras de colores, las lupas… todo esto y muchos otros elementos que están siempre en las salas de las educadoras de párvulos. Son éstas las herramientas que necesitan los niños para explorar, para aprender, para compartir, para desarrollar habilidades esenciales, para comprender el mundo y sobre todo, para ser ellos… niños.