Un bosque en la Institución Educativa Andrés Rosa solía ser un problema. A este llegaban abejas que alteraban la tranquilidad de los estudiantes y de toda la comunidad. La reacción inmediata frente a la aparición de estas abejas era llamar a los bomberos. Pero Darío Falla, profesor de Ciencias Naturales de este colegio en Neiva (ciudad del Departamento del Huila, Colombia), quiso darle un giro a esta problemática. Después de haber trabajado un proceso de residuos sólidos en el colegio, el cual los llevó a encontrar algunas de las colmenas invasoras, el docente quiso invitar a sus estudiantes a descubrir por qué estaban allí y qué les atraía de ese lugar en particular. En este proceso, contactaron a la Cooperativa Integral de Apicultores del Huila – COAPI, quien capacitó a los niños en la temática. Así, ellos aprendieron a entender el valor de las colmenas e identificar qué tipo de especies de abejas había en la escuela. El paso siguiente fue construir colmenas y pensar en la conservación de las abejas como un proyecto a futuro.

Así nació “Abejas IPCeistas”, una iniciativa que ha convertido a los alumnos en protagonistas y en agentes de cambio en un contexto altamente vulnerable.

La iniciativa del profesor permitió que los alumnos cambiaran la relación que tenían con las abejas visitantes, y ahora en lugar de querer deshacerse de ellas, sueñan con ver cómo crece esta iniciativa de conservación, el cual les ha dado herramientas de investigación y comunicación. Hoy, gracias a esto, muchos de los alumnos se han empoderado y se han parado en diversos escenarios para hablar de este proyecto con plena seguridad. Esto ha potenciado la motivación de los estudiantes, permitiéndoles soñar en grande. “Las abejas han sido la excusa para trabajar algo muy bonito que es poder rescatar en los chicos el creer en sí mismos”, dijo el profesor en Diario del Huila.

Con este trabajo de conservación de abejas, el cual está ligado al aprendizaje de la ciencia y al impacto ambiental, los estudiantes y el profesor ganaron el premio “Constructores de país”, un reconocimiento que otorga Colombia 2020.

Según menciona el profesor en Diario del Huila, “el premio es muy conmovedor porque resalta el trabajo de una comuna olvidada. Allí puede haber muchas dificultades pero también gente maravillosa”. Gracias a este premio, los profesores del colegio recibieron un taller de formación sobre cultura de paz dictado por la Pontificia Universidad Javeriana. El objetivo es que esta escuela, ubicada en la de la Comuna Ocho de Neiva en Colombia, reciba herramientas de construcción de paz que tengan un impacto dentro y fuera de la escuela.

Fuentes: Diario del Huila / El Espectador