4 razones neuronales para aplicar el yoga en niños y niñas

En el medio oriente, más específicamente en la India, hay registros de que el yoga existe desde hace más de  5 mil años. En ese entonces estaba muy ligada al hinduismo y a su plano religioso como una forma de meditación. Actualmente, es una actividad que llega a casas y escuelas de distintas partes del mundo.

En estos tiempos, tras más de 2 años de pandemia y distintas dificultades en distintos niveles –que puede repercutir en estrés para adultos y jóvenes–,  puede servir como una gran alternativa para trabajar la regulación de emociones y por si fuera poco, con muchos efectos positivos a nivel neuronal, especialmente para niños y niñas. .

A diferencia de los adultos, los niños y niñas tienen una mayor neuroplasticidad. En otras palabras, sus cerebros están dispuestos para comenzar a crear redes neuronales a través de toda  información absorbe. De éstas, luego dependerá el significado que den a sus primeros conceptos y pautas de comportamiento. 

1. Ayuda a dormir

En ese sentido, gran fue el descubrimiento de un estudio realizado por Universidad de Duke, que concluyó que hacer yoga aumenta los niveles de serotonina (igualmente llamada hormona de la felicidad).Se trata de un neurotransmisor que –entre otras cosas– provoca la creación de la melatonina, hormona que se encarga de regular los ciclos del sueño.

Entre otras cosas, el mismo estudio demostró que el yoga sirve como complemento a la farmacoterapia de la esquizofrenia y la de niños con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).

2. Es una gran herramienta para combatir el estrés

El Instituto de Salud Mental y Neurociencia de la India publicó en 2013 un artículo en el que mostraba la relación entre hacer yoga y una menor secreción de cortisol, hormona que se libera en respuesta a situaciones de estrés.

Niveles altos de esta hormona pueden desbalancear el rango óptimo de azúcar en la sangre, aumentar la grasa abdominal y debilitar el sistema inmune.

3. Te mantiene de buen humor

Otro estudio de la Universidad de Boston, Estados Unidos, indica el aumento del neurotransmisor inhibitorio llamado comúnmente GABA (Ácido gamma-aminobutírico), cuya función es reducir la actividad entre neuronas por lo que se relaciona con la relajación y la actitud hacia conflictos.

También se han encontrado bajos niveles de este neurotransmisor en personas que presentan cuadros depresivos importantes.

4. Método para manejar la ansiedad

La respiración controlada que exige el yoga está relacionada con la estimulación del nervio vago, que a su vez libera un neurotransmisor llamado acetilcolina, el más importante del sistema nervioso parasimpático que funciona como la parte tranquilizante del sistema nervioso central. De ahí se explica la sensación de calma que provoca. Por su parte, el sistema nervioso simpático hace de parte estimulante.

Se ha pasado por alto el potencial del yoga para tratar problemas que se hacen cada vez más comunes en los niños y niñas de hoy como el estrés, la ansiedad y el mal dormir. Impartidas de la forma correcta, las clases de yoga pueden ser divertidas para los más chicos, y al mismo tiempo transformarse en una alternativa que puede entregar incluso más beneficios que las actividades aeróbicas tradicionales.