El profesor de Historia y Artes, Alberto Sánchez, cuenta cómo fue pasar desde el pizarrón y tiza, hasta apretar un link y ver a sus alumnos/as a distancia.
Alberto Vicente Sánchez Letelier, es profesor de Historia, Geografía y Sociedad en la Escuela Superior Nueva Bilbao, ubicada en Constitución; una comuna de la región del Maule, al sur de Chile. Además, imparte un taller de música instrumental y es profesor de Artes Visuales, en la misma escuela y a sus 65 años.
Hace 44 años que imparte docencia en lugares como Talca, Santiago, Constitución, diversos sectores rurales y poblaciones. Hace 17 años trabaja en la misma escuela, empezó como profesor interino y se dio cuenta que cada día que hacía clases y compartía con sus alumnos era feliz; y esa felicidad dura hasta hoy.
Su motivación para seguir enseñando nada tiene que ver con lo económico. Lo que lo motiva para seguir ejerciendo es estar con sus alumnos y compartir con cariño –y respeto– junto a ellos/as.
“Mi unidad educativa es como mi segundo hogar, y la verdad tengo miedo de jubilar porque creo que algo de mi alegría se va a ir”.
En el contexto de pandemia y el inicio de las clases a distancia, sus alumnos pensaban que no lo iban a ver en clases, ya que saben que Alberto no está familiarizado con la tecnología. Sin embargo, sus colegas y las palabras de apoyo de directivos de su establecimiento lo han motivado mucho; los comentarios de apoyo siempre son enriquecedores para él. “Mi principal desafío fue lo tecnológico, incluso mi teléfono sirve solo para comunicarse por llamadas o mensajes de texto”, agregó el profesor.
Una de las mayores dificultades para los/as docentes en tiempos de clases a distancia, son las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs). Estas tecnologías son muy importantes para facilitar el aprendizaje y la comunicación con los estudiantes, pero también, requiere del esfuerzo de los/as profesores/as para adaptarse y aprender.
Pasar de la pizarra y la tiza, a las clases virtuales, ha sido un gran desafío para Alberto.
La complejidad de la tecnología y el no estar con sus estudiantes de forma presencial, le ha servido para crear un pensamiento más globalizado. Así, con la tutoría de su escuela, empezó a hacer clases virtuales mediante envío de videos, tutoriales y links para reforzar las clases.
También fue incluyendo a las familias; compartiendo experiencias, valores, conocimientos y haciendo más rica la experiencia de aprendizajes significativos. Su idea es enriquecer la relación personal tanto con sus estudiantes, la familia, sus pares y directivos; quienes han sido un gran apoyo.
Alberto empezó a aprender sobre las tecnologías necesarias para las clases a distancia en los horarios de computación de su escuela.
Además, fue día a día trabajando en la herramienta Eduplan; en donde le enseñaban cómo usar las aplicaciones y sitios web, así pudo practicar todo lo que aprendía en el computador de su casa. “Siempre se puede aprender algo nuevo”, dijo Alberto.
Le enseñaron a escribir correos, desarrollar guías, entre otras cosas. Pero cuando se vio en el desafío de impartir clases virtuales y reuniones, se le vino el mundo abajo: “Me sentí inútil por primera vez en educación”.
Empezó a ver tutoriales y preguntar a sus colegas, y ahora ocupa todas las tecnologías necesarias para dar sus clases a distancia.
Sus clases comienzan con una planificación vía Google Meet, comparte sus tutorías –desde lo más fácil hasta lo más complejo– de diferentes técnicas artísticas. Además, se preocupa de compartir valores en las clases de Historia, relacionando los momentos que viven sus estudiantes –en pandemia– más que preocupándose por una típica clase en tiempos normales.
Sus actividades apuntan a la relación personal alumno/a y familia, a un conocimiento pedagógico donde refuercen la investigación y al momento actual que viven como comunidad escolar. Alberto valora día a día la contención y crear un aprendizaje significativo, donde eso que aprenden sus alumnos y él, se pueda aplicar a diferentes situaciones.
“Pincho un link y comienza el mágico proceso de ver a mis estudiantes”, indicó el profesor.
Así, este docente de 65 años comenta que su forma de enseñar ha evolucionado y cambió, como todas las realidades que habían antes de la pandemia. Cada día, para él, es un nuevo desafío para hacerlo mejor.
Estimado Equipo Elige Educar: mañana lunes 6 inicia proceso de retiro docente el profesor Alberto Sánchez. Les agradecemos esta hermosa, significativa y profunda entrevista al docente que jubila.
Saludos cordiales
Atte directora escuela superior nueva Bilbao – constitución