David Ausubel propone un tipo de aprendizaje en el que el/la estudiante asocia, reajusta y reconstruye información —o conocimientos— que ya poseía.
¿Qué es el aprendizaje significativo? De acuerdo a David Ausubel, un psicólogo y pedagogo estadounidense que llegó a convertirse en uno de los grandes referentes de la psicología constructivista desde 1950, es un tipo de aprendizaje que nace de relacionar los conocimientos previos del/la estudiante con nueva información.
De esta manera, apoyándose en sus conocimientos previos, construye los nuevos. El aprendizaje significativo involucra la modificación y evolución de la nueva información, así como de la estructura cognitiva envuelta en el aprendizaje.
El aprendizaje significativo está basado en la comparación de conocimientos previos con nuevos
El proceso genera nuevas habilidades, conocimientos y destrezas, ya que reestructura un nuevo aprendizaje comparándolo con el anterior. Esto ocurre cuando la estructura cognitiva asocia la información nueva con los conceptos ya implantados y, por consecuencia, establece una conexión.
Las ventajas del aprendizaje significativo son variadas pero la principal es que los/as estudiantes aprenden de situaciones reales que se presentan en su contexto y, en ellas, pueden aplicar sus saberes y encontrar un significado a lo aprendido.
Los estudiantes se vuelven más autónomos/as y aprenden de manera eficaz, de acuerdo a sus objetivos y necesidades.
Este modelo cumple con una serie de características y te nombraremos las 5 principales:
- Los datos deben tener significado para el/la estudiante. No debe ser solo memorizar.
- El aprendiz debe entender la información que se le proporciona y es recíproco, es decir, existe retroalimentación entre emisor y receptor.
- El aprendizaje adquirido puede ser aplicado en diferentes contextos.
- La información nueva complementa y enriquece la información anterior.
- El estudiante tiene la disposición de aprender, siempre y cuando el conocimiento nuevo tenga lógica y significado para él/ella.
Además, David distingue tres tipos de aprendizaje significativo: de representaciones, de conceptos y de proposiciones.
- Representaciones:
Se trata de la forma más básica y elemental de aprendizaje. De este dependen los demás tipos de aprendizaje, ya que, en ella, la persona otorga significado a determinados símbolos, asociándolos a aquella parte concreta y objetiva de la realidad; que se encuentran en el contexto del/la niño/a.
Por ejemplo las palabras “papá”, “mamá”, “gato”, “pelota”, adquieren significado porque se refieren a objetos y sujetos propios del niño.
- Conceptos:
Este tipo de aprendizaje significativo es parecido al anterior y se apoya en él para existir, de modo que ambos se complementan y "encajan" entre sí. Sin embargo, hay una diferencia entre ambos.
El aprendizaje de conceptos se relaciona con una idea abstracta en lugar de algo concreto, algo que tiene un significado muy personal y accesible solo a partir de nuestras propias experiencias personales; algo que hemos vivido nosotros y nadie más.
Por ejemplo, para llegar a interiorizar la idea de lo que es una hiena es necesario desarrollar una idea de “hienidad” que permita diferenciar a estos animales de los perros, los leones, etc.
- Proposiciones:
En este aprendizaje el conocimiento surge de la combinación lógica de conceptos y se basa en los dos tipos de aprendizaje anteriores. Cuando un concepto nuevo es asimilado, el estudiante lo integra en su estructura cognitiva con los conocimientos previos, produciendo nuevos aprendizajes.
Por eso, constituye la forma de aprendizaje significativo más elaborada y, a partir de ella, se es capaz de realizar apreciaciones científicas, matemáticas y filosóficas muy complejas.
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