Este futuro profesor busca aportar a través de la actividad física

Kevin Mora es un estudiante de cuarto año de Pedagogía en Educación Física, Deportes y Recreación de la Universidad Austral de Chile. Reside en un sector rural cercano a la ciudad de Valdivia, al sur de Chile, lejos de su hogar (Lenca, Carretera Austral) por la pandemia y de su familia (madre, hermanos y hermana). Su motivación por estudiar pedagogía nació desde pequeño porque tuvo muy buenos profesores en su camino; personas a las que admira hasta el día de hoy. Sin embargo, además de ellos, el motivo más importante fueron sus hermanos y su hermana. “Desde que nacieron fueron mi luz, y al entrar en la carrera pude darme cuenta de que ayudé a mi madre a educarlos, quizás con cosas que me parecían mínimas, pero que en el fondo fueron muy importantes”, expresó el estudiante. Actualmente, Kevin, trabaja en la Escuela de Fútbol Femenino de la universidad, para el Instituto Nacional del Deporte (IND) y para la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB). Además de variadas instituciones deportivo-recreativas de diferentes zonas.

“Las experiencias de mis prácticas y de mi trabajo han sido muy buenas y de suma importancia para quien soy ahora”.

Además, mencionó que siempre intenta ir de menos a más y gracias a ello, de cada situación se lleva un tremendo aprendizaje y puede dejar un pequeño grano de arena en diferentes centros educacionales. “Lo que más amo de mi profesión es aprender”, aseguró Kevin. Para este futuro profesor es increíble que tanto buenos como malos momentos dejen un aprendizaje, ya sea para mejorar, mantener prácticas —y actitudes— e incluso adaptarse. También, valora la cercanía y el contacto con diferentes personas que conlleva esta profesión. Ha trabajado con adultos mayores, jóvenes y niños y, asegura que, cada persona —independiente de quién o qué haga— tiene algo que puede enseñar. El contexto que vivimos afecta en gran medida a los estudiantes de educación física y pedagogía en general, ya que la mayoría de los ramos son prácticos entonces se hace difícil aprender técnicas a través de un computador o celular, que deberían ser aprendidas de manera presencial. Sin embargo, se pueden adquirir otros conocimientos mediante nuevas ideas, tal como dijo Kevin: “Quizás este tiempo nos sirva para innovar en diferentes ámbitos de la vida”.

“Decidí comenzar a hacer videos con la finalidad de recrear a través de juegos, canciones, bailes, animaciones y material recreativo, para subirlo a las redes sociales como Instagram, Facebook y YouTube”.

Así, Kevin busca llegar a más niños y niñas que necesiten un momento divertido y diferente de lo que pueden estar viviendo en casa. Siempre le ha gustado compartir su vida como estudiante y como trabajador del área en RRSS. También, le gusta mucho el área audiovisual y usa mucho ese tipo de herramientas: “No soy un profesional, pero si es algo que me divierte y me sirve mucho”. Hace varios años comenzó a grabar entrenamientos, clases, juegos de trabajo, entre otros. Hace un año, graba y edita videos junto a su amigo Mario, quien tiene discapacidad visual. En conjunto comenzaron a entrenar futbol y a grabar los entrenamientos. Desde ahí, ya con la experiencia y el surgimiento de la pandemia, pasaban días en donde extrañaba sus clases, entrenamientos, talleres y eventos. Así fue como se dijo a sí mismo: “No puedo estar así, de alguna forma podría aportar, de alguna forma tengo que cumplir con lo que amo”. Ahí pensó en ideas creativas para ayudar a sus alumnos/as, como por ejemplo en que quizás no todas las alumnas de la escuela de fútbol femenino tendrían un balón para jugar en casa, así que buscó tutoriales, juntó los materiales, le dijo a su pareja que lo ayudara a grabar, editó el video y lo compartió.

“Tuvo una muy buena llegada tanto para la institución en donde trabajo, como para la gente que conozco y que vieron el video”.

Desde ese momento, dijo que haría varios videos para recrear a las personas con este tipo de material. Comenzó a compartir sus videos en grupos de educación física de Facebook y en su Instagram personal. Los videos tienen muchas reproducciones, llegando uno de ellos a más de 16.000 en Instagram. Esta iniciativa no pretende buscar recursos lucrativos, es solo un deber que Kevin considera como futuro educador; poder aportar con algo durante días de pandemia. Además, de que lo ayuda a mantenerse activo y haciendo lo que ama. Desde el primer video, ha recibido muy buenos comentarios, ideas y reflexiones. “También he recibido y brindado ayuda, he conocido personas de diferentes países entusiasmadas, apoyando el trabajo que comparto, y eso es de gran valor para mí”. Sin duda alguna, esta es una iniciativa que piensa mantener en el tiempo. Este proceso le ha dejado muchas enseñanzas y también valores. Aprendió —y sigue aprendiendo— que de situaciones difíciles siempre se puede sacar algo bueno y creativo, solo se debe estar dispuesto y ser conscientes; no solo de lo que uno vive o tiene, sino que también de lo que uno puede entregar a los demás.